Tomada cuando volvía de Asturias a Zaragoza. Siempre que puedo paro en Saldaña y hago una visita a mi antiguo colegio, el " San Francisco Javier", de los Misioneros Combonianos.
En la actualidad lleva cerrado muchos años y en estado deplorable. Una pena que los recuerdos que uno tiene contrasten tan dramáticamente con la realidad.
Yo lo recuerdo lleno de vida, con críos jugando, gritos, carreras... y ahora esta así. Aun asi todos los años me desvío un poco de la ruta para echar un pequeño vistazo quizás con la esperanza que "resucite".
O mejor, aun de ver si por casualidad hay algún excompañero como: Uria, Lozano, Javi Llamazares, Lito, Cesar, Isaac, Roberbo Bajo, Eloy, Quisco... y tantos mas que no tengo tiempo ni memoria para ponerlos a todos. O mejor aun al tutor de aquellos años el Padre Daniel Villaverde.
De todos modos es decepcionante, que a lo largo de estos años de era digital, aun no encuentre apenas nada de información del colegio o sus ex alumnos.
Quizás esto sea ahora de lo poco junto con la revista Mundo Negro, que guarda algo de vinculación.
Un saludo.
2 comentarios:
soy el sobrino de Daniel Villaverde, buscando un reportaje sobre él me encontré con esta entrada en tu blog, me alegra que lo recuerdes, sigue por Kenya, en una nueva misión en Marsabit.
Yo también pasé por Saldaña, en los Campamentos de Verano, ahora está de pena, si deseas cualquier cosa sobre mi tío escríbeme a diejino@gmail.com... seguro que le gusta reencontrarse con amigos del pasado. Un saludo.
Muy buenas fotos y totalmente de acuerdo. Yo pasé allí 4 años, grandes recuerdos y mucha nostalgia... es una época de mi vida que no cambiaría por nada del mundo. También Asturiano, de Pola de Lena, también en el exilio (en Barcelona)...pero de un curso menos. Yo iba con Jesús (el hermano mediano del clan Uria), con Javi (el hermano de Isaac), Jose Antonio y David (de Pola del Pino), Chuso (de Moreda), Juan Pablo (Avilés), Jaime, Germán, Rubén, Eduardo y tantos otros. La nostalgia me ha hecho buscar noticias, fotos, información de entonces e igual que tú hay muy poco rastro...y el rastro triste... sabía que el colegio se había cerrado ya que también hace años cada vez que pasaba cerca me desviaba para dar gusto al recuerdo. En esta búsqueda de información también me he encontrado con la triste noticia del fallecimiento (hace ya bastantes años) del que fue mi formador, el padre Ampelio... La alegría de una época que nos ha marcado y el agradecimiento a todos los que participaron de ella es lo que nos queda y quedará para siempre...Gracias Saldaña, gracias profesores, gracias formadores, gracias compañeros... hasta siempre amigos.
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